Programa Fortalecimiento del rol profesional a través de las Prácticas, Educación General Básica
En Chile aún existe una vulneración de derechos hacia niños, niñas y adolescentes, y las políticas públicas han sido deficientes al momento de enfrentar los desafíos que respondan a los derechos vulnerados por los menores. Esto, en un contexto de cambios sociales observados como parte de los fenómenos posmodernos de la última década, que han mostrado la existencia de nuevas formas familiares, que rompen los esquemas tradicionales, lo que, como todo cambio, trae la necesidad de investigar y desarrollar una comprensión aún mayor en el ámbito socio-jurídico, requiriendo funcionarios que trabajen con un foco más progresivo en temas relacionados con intervención familiar. Asimismo, se necesita garantizar la educación de calidad, que es uno de los derechos fundamentales de niños, niñas y adolescentes, y adaptarla a los tiempos actuales, a través de docentes que cuenten con conocimiento nuevo y actualizado en educación integral y que apliquen nuevas e innovadoras metodologías para el aprendizaje, en consonancia con las plataformas digitales. De esta manera, se puede potenciar la educación inicial, básica y media, el idioma inglés, las habilidades artísticas y musicales y los apoyos psicopedagógicos para personas que presentan riesgo académico y necesidades asociadas a su proceso de aprendizaje, mediante la generación de propuestas y diseños de acciones educativas inclusivas, participativas y transformadoras, donde la tecnología juegue un rol fundamental. La necesidad detectada por la Facultad de Educación y Ciencias Sociales de la UNAB va en línea con el Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) 4, “Educación de Calidad”, específicamente en lo que se refiere a de aquí a 2030, asegurar que todas las niñas y todos los niños terminen la enseñanza primaria y secundaria, que ha de ser gratuita, equitativa y de calidad y producir resultados de aprendizaje pertinentes y efectivos. El desarrollo de la asignatura Práctica avanzada corresponde a un nivel final de práctica, donde los estudiantes enfrentan de manera individual la práctica docente profesional, observando, contextualizando, planificando, implementando, reflexionando y autoevaluándose sobre el proceso de enseñanza y aprendizaje. Así, la práctica docente final se constituye en un espacio de aprendizaje y compromiso social, enfocado a un desarrollo profesional que incorpora reflexión, creatividad, autonomía y toma de decisiones para potenciar las habilidades de los estudiantes, independiente de sus niveles escolares, culturales, cognitivos, afectivos y lingüísticos. En la Práctica Avanzada el/la estudiante debe permanecer 15 semanas como mínimo en la unidad educativa, durante 12 horas semanales, en las que deberá realizar al menos 30 clases en el semestre. Por su parte, el desarrollo de la asignatura Práctica Profesional, que corresponde a un curso de la última etapa del proceso de formación inicial docente de Educación General Básica, en el cual los futuros educadores ejercerán, con cierto grado de autonomía, su rol profesional en una unidad educativa. Esta práctica considera la permanencia de 15 semanas como mínimo en la unidad educativa, durante 20 horas semanales, en las cuales el alumno deberá realizar al menos 40 clases durante el semestre. Además, debe asistir semanalmente a taller de la experiencia en la Universidad. Como parte de la ejecución de estas actividades académicas que se realizan en contexto de VcM, en Práctica avanzada los futuros educadores ejercerán, con cierto grado de autonomía, su rol profesional, con toda la complejidad que significa la tarea de formación y desarrollo de los alumnos en la Unidad Educativa. En este contexto, el futuro profesor (a) se incorpora a un curso de primer o segundo ciclo, para realizar una intervención pedagógica asistida por el profesor guía y un profesor de práctica de la Universidad. Dando continuidad a proceso, en Práctica Profesional los futuros docentes se incorporan a un curso para realizar una intervención pedagógica, asistida por el profesor guía y un profesor de práctica de la Universidad. Esta intervención contempla la etapa de diagnóstico del grupo curso, la planificación, ejecución y evaluación de unidades de aprendizaje. Asimismo, debe realizar diversas actividades e informes que den cuenta de sus conocimientos pedagógicos y disciplinarios. Esta actividad tiene como objetivo contribuir en los procesos de enseñanza, actualización y mejoramientos de los aprendizajes de escolares de Enseñanza Básica. El entorno relevante de la carrera de Educación General Básica corresponde a establecimientos educacionales públicos, cuya administración depende de corporaciones municipales, como Las Condes, Santiago y Viña del Mar. También considera colegios particulares (subvencionados o pagados), como Compañía de María en Viña del Mar, Colegio del Valle, colegio Carmen Chacón, colegio Universitario Salvador, colegio San Ignacio del Bosque, Colegio Santa Teresa de Quilpué, entre otros. Durante el 2022, el programa benefició a alrededor de 15 instituciones, entre las que se destaca: Durante la ejecución del programa se aportó con 11.880 horas de trabajo a las instituciones del entorno relevante, las que se distribuyen de la siguiente manera:
Detalle del Programa