“Fortalecimiento del rol profesional a través de las prácticas profesionales en la Industria” de Ingeniería en Automatización y Robótica
Las industrias hoy necesitan mejorar su productividad a través de la automatización de algunos procesos y, para ello, requieren de profesionales con conocimientos nuevos y actualizados que les ayuden a implementar esas transformaciones en su estrategia de trabajo. Con el objetivo de contribuir a satisfacer la creciente demanda en ciencia y tecnología de diversos rubros industriales del país, así como de fortalecer la formación profesional de sus estudiantes, la carrera de Ingeniería en Automatización y Robótica de la Universidad Andrés Bello contempla, en su malla curricular, la realización del programa “Fortalecimiento del rol profesional a través de las prácticas profesionales en la Industria”, a través del cual los alumnos colaboran en la implementación y supervisión de sistemas de automatización y de control de procesos industriales. El trabajo realizado a través de las prácticas de Ingeniería en Automatización y Robótica incluye labores de gestión, administración, identificación y respuesta a las demandas de las empresas donde se desempeñen, pertenecientes a diferentes rubros económicos, como minero, telecomunicaciones, forestal, pesquero, alimenticio y retail, entre otros. De esta manera, las empresas reciben a estudiantes con conocimientos e ideas nuevas e innovadoras, quienes colaboran, por medio de la construcción de propuestas de automatización y robotización, a optimizar los procesos productivos en una sociedad crecientemente tecnificada. Por su parte, a través de esta iniciativa de Vinculación con el Medio, los estudiantes de Ingeniería en Automatización y Robótica ejecutan actividades curriculares, en el marco de las asignaturas “Práctica I (Práctica Temprana)” y “Práctica II (Práctica Profesional)”, aplicando los conocimientos adquiridos en clases en un contexto real, y desarrollando habilidades y valores como la comunicación efectiva, el trabajo en equipo, la resolución de problemas, el liderazgo y la ética profesional, entre otros. La Práctica I, realizada tras finalizar el primer año de carrera (segundo semestre), es la primera inserción del estudiante en la empresa, lo que le permitirá conocer de primera fuente su campo laboral. La Práctica Temprana, cuya duración es de 180 horas cronológicas, permite al futuro profesional acercarse, sensibilizarse y descubrir el campo ocupacional mediante procesos de observación participativa en lugares de trabajo auténticos. La Práctica II corresponde a la inserción laboral más profunda del estudiante, mediante la cual aplicará sus conocimientos profesionales en su campo laboral. El objetivo es poner al alumno en contacto con el trabajo profesional en una empresa y que enfrente el desafío de apoyar la búsqueda de soluciones concretas a problemas que se presentan en la organización. Esta instancia sólo puede ser realizada si el alumno ha aprobado su primera práctica, así como todas las asignaturas hasta sexto semestre. Para desarrollar su trabajo, cuenta con 360 horas cronológicas, durante las cuales debe realizar proyectos en algunas de las siguientes áreas de desarrollo profesional: automatización, control automático, instrumentación, robótica, telecomunicación, entre otros aspectos que estuvieran orientados al área tecnológica. Durante 2020, las prácticas temprana y profesional se ejecutaron de modo online, producto de la pandemia del virus SARS-COV2. En dicho año, la Práctica I contó con la participación de 31 estudiantes, quienes aportaron 11.160 horas de trabajo en 31 empresas, como Adidas Chile, Uplots Sap, VLKN Fix SpA y Vargas Detailing SpA., contribuyeron en la búsqueda de soluciones a problemas tecnológicos, desde el punto de vista ingenieril. Por su parte, 27 estudiantes realizaron su Práctica II, quienes destinaron 9.720 horas de trabajo, asesorando a 27 empresas en el diseño e implementación de soluciones en automatización que, entre otras posibilidades, les permitiera mejorar la calidad de su producción. Para ello, se realizaron propuestas asociadas al control automático, instrumentación, robótica, telecomunicación, entre otros, que estuvieron orientadas al área tecnológica. Entre los centros de práctica beneficiados, destacan: Consultora EG-Services Spa; Prodycma Spa; Sociedad de implementación de soluciones de tecnología moderna Spa; Factor B Ing. Electrónica y automatización Spa; Soluciones Técnicas y Químicas, Soteq Limitada; Austral Robotics Limitada; Softys; y Sipesa Chile Limitada.Un trabajo dedicado a optimizar los procesos productivos de diversas industrias
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